calas Ibiza en coche de alquiler

Ibiza en coche de alquiler

Ibiza es una isla que se vive mejor sobre cuatro ruedas, que guarda calas de arena blanca y fondos turquesa, que regala atardeceres de postal y custodias de piedra donde el tiempo parece detenido. Alquilar un coche es la llave para acceder a su verdadera esencia: desde recónditos rincones marinos hasta miradores solitarios y yacimientos donde nació la historia de Eivissa.

Libertad a tu ritmo: alquilar un coche en Ibiza

Nada iguala la sensación de arrancar tu propio coche y recorrer cada kilómetro de la isla a tu antojo. El precio medio de un alquiler de coche en Ibiza ronda los 39 € por día, con opciones que bajan hasta 15 € en temporada baja y suben en verano según demanda. Moto Luis Rent a Car, Centauro, Europcar, Sixt, Hiper Rent a Car o Record Go son algunas de las compañías que encontrarás en el aeropuerto de Ibiza, San Antonio o en Ibiza ciudad, sumando más de 30 oficinas repartidas por toda la isla.

Ojo con la temporada alta: del 1 de junio al 30 de septiembre, sólo podrán entrar a la isla 16 000 coches de alquiler diarios, una medida para preservar la movilidad local y el medio ambiente. Lo ideal es reservar con antelación, comparar coberturas sin sorpresas (franquicias, seguros a todo riesgo) y tener claros puntos de recogida—muchos ofrecen transfer gratuito desde el aeropuerto o el puerto.

Calas que enamoran: de Cala Conta a Ses Salines

Una ruta por Ibiza no estaría completa sin detenerse al menos en estas calas de Ibiza:

  • Cala Conta (Platges de Comte): situada a pocos minutos de Sant Antoni, sus islotes son un balcón natural para practicar snorkel y disfrutar de cócteles al borde del chiringuito al atardecer.
  • Ses Salines: bordeada por el Parque Natural del mismo nombre, esta playa combina dunas, tierras de sal y aguas cristalinas que invitan a sumergirse en un oasis de paz.
  • Cala d’Hort: con vistas al místico islote de Es Vedrà, esconde una cala íntima de arena dorada y aguas transparentes, perfecta para los que buscan un rincón con encanto casi esotérico.
  • Cala Nova: al este, ligero aire bohemio, aguas turquesas y un par de chiringuitos donde saborear ensaladas frescas antes de volver a la carretera.

Cada una de ellas tiene acceso por carreteras bien señalizadas; el coche es, sin duda, el mejor medio para saltar de una a otra sin depender de horarios de bus o itinerarios de barco.

Miradores para el atardecer en Ibiza y el sol hundiéndose en el Mediterráneo

Cuando la tarde avanza, busca uno de estos rincones para inmortalizar el atardecer en Ibiza:

  • Ses Variades / Café del Mar, Sant Antoni: un clásico donde la música chill‑out se funde con un cielo que se tiñe de rosa y naranja; llega pronto para elegir mesa en primera línea.
  • Torre des Savinar (Torre del Pirata): un antiguo cuartel militar en Cala d’Hort que, tras una breve caminata, regala vistas frontales de Es Vedrà y un silencio casi reverencial.
  • Mirador de Santa Eulària: en la costa este, este punto elevado ofrece panorámicas de 180 ° sobre el mar y el pueblo, ideal para una puesta de sol tranquila, acompañado de una copa en los restaurantes cercanos.
  • Punta Galera: rocas planas frente al Cantábrico mediterráneo, donde el sol baja despacio sobre el horizonte y las formaciones calizas enmarcan el espectáculo de la luz.

Con el coche puedes organizar tu propio “tour del atardecer”, combinando cada punto según la posición del sol y la dirección del viento.

Viaje en el tiempo a través de los yacimientos arqueológicos de Ibiza

Entre calas y paisajes, la isla ofrece una historia grabada en piedra. Estos son algunos de los yacimientos arqueológicos de las Islas Baleares que puedes visitar en Ibiza:

  • Poblado fenicio de Sa Caleta: declarado Patrimonio Mundial y recientemente inaugurado su Centro de Interpretación, donde las rutas virtuales te sumergen en la vida naval y comercial de los primeros colonos (s. VII a.C.)
  • Necrópolis de Puig des Molins: con más de 3 000 tumbas excavadas en roca, es la necrópolis púnica mejor conservada del Mediterráneo occidental. Su museo monográfico permite descender a algunas cámaras funerarias.
  • Cova des Culleram: santuario púnico dedicado a la diosa Tanit, a 150 m de altitud, con vistas a Es Tagomago; un lugar de culto y oráculo donde el eco de los antiguos rituales aún parece resonar.
  • Ses Païsses: única villa púnico‑romana excavada por completo, situada entre Cala d’Hort y Cala Salada, que muestra el trazado original de las murallas y estancias domésticas.
  • Acueducto de s’Argamassa: remanente romano que transportaba agua a una piscifactoría costera en Santa Eulària—testimonio de la sofisticación hidráulica de la Antigüedad.

Gracias al coche puedes orquestar esta ruta cultural sin prisas, deteniéndote en los paneles explicativos de cada yacimiento y dejando que el silencio del campo te conecte con los ecos de quienes habitaron la isla hace más de dos mil años.

Ibiza es así: un viaje que te invita a exprimir cada momento, a combinar libertad y descubrimiento, a dejarte seducir por calas de ensueño, atardeceres de película y un pasado que aún habla en piedra. ¿Listo para poner en marcha el motor y explorar la isla blanca?