Este pez es considerado de gran valor porque se dice que da mayor potencia sexual, disminuye el colesterol, mejora la circulación, rejuvenece la piel y otorga longevidad a quien la consume.

Totoaba continua siendo traficada en aguas mexicanas

Totoaba continua siendo traficada en aguas mexicanas

En Taiwán asestaron un fuerte operativo al tráfico del buche seco del pez Totoaba, considerado por sus comercializadores como “la cocaína del mar”. El embarque fue detenido por los investigadores del FBI y llevado a las Oficinas de Investigación Criminal de Taiwán. El pedido fue realizado desde allí y luego enviado a México utilizando un servicio de envíos internacional.

Este pez es considerado de gran valor porque se dice que da mayor potencia sexual, disminuye el colesterol, mejora la circulación, rejuvenece la piel y otorga longevidad a quien la consume.
Este pez es considerado de gran valor porque se dice que da mayor potencia sexual, disminuye el colesterol, mejora la circulación, rejuvenece la piel y otorga longevidad a quien la consume.

El tráfico de Totoaba continua

La Totoaba fue descubierta gracias a la investigación realizada por el FBI y la policías del lugar, integrando los servicios de las autoridades de las aduanas de Taiwán. Es así como en el embarque se recuperaron 161 buches del Totoaba, pez de Nueva Tapei, que fueron traídos de manera ilegal desde México.

La información recibida indica que un ciudadano de aproximadamente 30 años, había recibido las vejigas natatorias del pez Totoaba. El ciudadano de apellido Yao, recibió el cargamento de 19 kilogramos, con un valor aproximado de 900 mil dólares en el mercado negro; esto sucedió entre el 28 de julio y el 12 de agosto.

Un seguimiento de investigación

Los datos del tráfico fueron controlados por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) junto a la Oficina de Investigación Criminal (CIB) de Taiwán; de esta manera fue llevado el seguimiento hasta que las partes del pescado fueron negociados y mandados desde México. El modo de transporte fue a través de los servicios de envíos entre países interrelacionados con mensajería, con dirección a China, cruzando por los Estados Unidos.

El problema con este tipo de energía es que los buches de pez pertenecen a una especie que se encuentra en peligro de extinción. Luego, del análisis respectivo realizados por los especialistas de los laboratorios en Estados Unidos y Taiwán, que confirmaron que, definitivamente, si pertenecen a esa especie y se encuentra en estado de protección. Es así como La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de fauna y Flora Silvestres (CITES) junto a la legislación mexicana lo considera y castiga quien comercie con la especie en cuestión.

Casos anteriores de tráfico

Un suceso de igual importancia ya había ocurrido en mayo de 2019, esto lo indica un informe recibido desde Estados Unidos, donde se indicaba que las aduanas en China decomisaron aproximadamente 565 vejigas natatorias o buches secos de Totoaba, con un peso aproximado de 167 kilogramos, representando un valor de 7.65 millones de dólares.

Es así como la incautación millonaria de buches secos, realizada en Nueva Taipei, demuestra que no hay medidas estrictas que detengan el tráfico de esta especie marina.

Así que la captura ilegal de Totoaba continua en el Alto Golfo de California, en la triste espera de una estrategia acertada de México que ponga fin a la pesca ilegal de esta especie y que además esta arrasando con la vida de otra especie en vías de extinción, como lo es la vaquita marina. Esta última muere enredada y atrapada en las redes de enmalle echadas al mar en el lugar natural donde viven. De tal manera ambas especies, en peligro de extinción, junto a otras especies, mueren desproporcionalmente.

México se encuentra bajo la lupa

De continuar esta situación, México se encontrará en aprietos, se supone que para el mes de octubre tiene que rendir cuentas ante los miembros de la CITES; además tiene que exponer los avances conseguidos en cuanto al tema de la protección del mamífero marino con mayor peligro de extinción. De no ser así, México se verá en la obligación de pagar multar y cumplir con una serie de sanciones comerciales , sumando a estas las ya recibidas por los embargos pesqueros impuestos por Estados Unidos a la región, esto va desde el mes de agosto de 2018.

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