La Violencia Policial continua en Estados Unidos
Es así como Policías de Los Angeles se ve en la obligación de investigar el fallecimiento de un ciudadano de origen afroamericano que fue muertos a tiros por par de policías, el fallecido se transportaba en un bicicleta.
Estados Unidos continúa con la violencia policial
El departamento de policía de Los Ángeles se ha visto en la obligación de iniciar una fuerte investigación sobre los hechos ocurridos el lunes en horas de la tarde donde dos agentes del cuerpo policial acabaron con la vida de un ciudadano afroamericano que circulaba en bicicleta.
De esta manera, detectives del cuerpo policial se dirigieron a las 15:16 al sector bloque 1200 de West 109th Place, para realizar las investigaciones relacionadas con el presunto tiroteo que ocurrió en el lugar, según informó la agente Juanita Navarro-Suarez.
Según explicaciones de la policía a través de cuentas de Twitter, indican que el encuentro se origina en el momento del contacto, luego de una pelea entre el sospechoso y los agentes.
Las versiones dadas por los agentes indican que el hombre sacó un arma y se produjo el tiroteo en el que participaron los agentes y el fallecido. No existe ninguna explicación en un primer momento de las circunstancias que provocaron el tiroteo.
Los supuestos hechos
El teniente Brandon Dean declara ante un conocido diario que, los dos policías realizaban el recorrido acostumbrado, el día lunes por la noche, ambos pertenecen a la comisaría de Los Ángeles, desde su auto observan al ciudadano en bicicleta que iba incumpliendo leyes de tránsito.
El mismo teniente, no tiene claro la norma de tránsito que incumplía el ciudadano fallecido. Al proseguir , dice que los dos agentes le dan la voz de alto, esto hace que el hombre tire la bicicleta y salga corriendo. Esto hace que se inicie la persecución.
El sospechoso es nuevamente contactado pero se viaolenta y propina un golpe a uno de los agentes , en el rostro. Esto hace que deje caer un hatillo de ropa que llevaba y los agentes dispararon al ver asomarse un arma entre la ropa que arrojo el fallecido, indicó el teniente.
El ciudadano no ha sido identificado aún, aunque si se certifico el motivo de su muerte, continuo Navarro Suárez.
La presunta arma que portaba el hombre afroamericano fu confiscada. Ninguno de los dos agentes resultó herido.
Protestas ya esperadas
Las protestas no se hacen esperar y horas después de la balacera, se han iniciado concentraciones de personas que exigen que se aclare lo que sucedió en ese lugar. Además esperan que la población sea informada de los hechos.
Rápidamente, la concentración llegó a tener más de 100 personas; es así como se movilizaron hasta la comisaría en la calle Imperial Highway, donde prosiguieron las manifestaciones de desacuerdo en el proceder policial actual.
Las personas concentradas exigían a las autoridades que nuevamente se había reflejado el exceso de los policías, que todo se veía como un tiroteo injustificado a lo que coreaban “ Decid su nombre” y “ No hay paz sin justicia”.
Testigos difieren de la versión policial
Un hombre de 68 años, Arlander Givens, vecino del lugar, pusó en duda la veracidad de los hechos narrados por los agentes al declarar que la policía le disparo a un hombre que no portaba arma alguna. Si se hubiese agachado a agarrarla, sería diferente, comentó el testigo Givens. Pero si esta en suelo para que le dispararon. Su mismo relato indica que estaba desarmado, según Givens.
Hasta los momentos, las investigaciones siguen en marcha, el cuerpo policial ya tiene identificado al afroamericano que recibe el nombre de Dijon Kezzee de 29 años de edad, según testigos, el hombre se encontraba en el suelo cuando recibió más de diez disparos.
El suceso ha provocado indignación entre los residentes locales y un centenar de personas que se siguen congregando en el sur de Los Angeles en protesta contra la brutalidad policial y el racismo. Una mujer que conocía al fallecido y presenció la escena detalló a la prensa que Kizzee llevaba una toalla y ropa en las manos, y si es cierto que iba armado, el tiró todo al suelo, con darle un solo tiro en la pierna bastaba no hacía falta dispararle tantas veces. Ya no se sabe a quien protege la policía.