Tribunal cierra Dakota Access Pipeline, a pesar de ser reabierto por orden Trump
Pese a la decisión del presidente de Estados Unidos de iniciar las operaciones de Dakota Access Pipieline, un tribunal ordenó el cierre temporal del oleoducto. Los pobladores de la región han rechazado la idea por años, debido al temor que sienten la contaminación en esa zona.
Juez cierra Dakota Access Pipiline
La orden de cierre temporal la dictaminó el juez, James E Boasberg. De esta forma, apoya la idea de los indígenas y grupos ecologistas, que consideran que el oleoducto puede traer problemas ambientales a la zona, que hasta ahora se ha librado de ese problema.
El juez del tribunal de Estados Unidos al ordenar el cierre de la planta Dakota Access Pipiline le da un espaldarazo a la decisión del presidente de reiniciar sus funciones. Es así como el oleoducto ha sido rechazado desde su primera instalación por los moradores indígenas y por los grupos ecologistas.
Así es como el oleoducto tiene aproximadamente 1900 kilómetros de longitud; la distancia que recorre es extensa; por ese motivo, existe el temor de accidentes que pongan en riesgo la salud ambiental de la zona; que va desde la cuenca de formación Bakken en Dakota del Norte hasta el centro de distribución en Illinois.
El oleoducto representa un peligro ambiental
La orden de cierre debe proceder desde antes del 5 de agosto. De hecho, la orden del juez es reforzada al considerar que el oleoducto en cuestión, no esta en condiciones estables, ni respeta los patrones ambientales exigidos. Especialmente, cuando se trate de derramamientos de petróleo.
Por esto mismo, el juez procedió a la suspensión de permisos de operación que ya habían otorgado el Cuerpo de Obras Públicas del Ejército a la empresa Energu Transfers. A partir del permiso, se construiría una parte de la tubería bajo el lago de la presa de Oahe en Dakota del Sur y Dakota del Norte, siendo este el cuarto embalse artificial más grande del país.
El Juez asegura que las tribus nativas estadounidenses temen un desastre ambiental en la zona. Es por eso que desde hace años tratan de cancelar los permisos de carácter federal que permitan conducir el petroleo bajo el lago. Aunque la detención de las labores es temporal, es un paso más hacia la obtención de su objetivo agregó el juez.
Un punto de revés para Trump
La opinión pública y las estadísticas indican un punto de revés para el actual mandatario estadounidense. Sin duda alguna, la apertura de la actividades en este lugar y en Keystone XL fueron una de sus primeras decisiones como presidente al tomar el poder.
Esencialmente, no se ganó la simpatía de las tribus Siux de Standing Rock y de Cheyenne River. Por consiguiente, lograron demandar por la salvación del lago, en detrimento de operaciones que contaminarían las aguas y degradarían sus espacios sagrados de importancia histórica y cultural.