El Tratado de Límites y Aguas de 1994 entre Estados Unidos y México
La extracción del agua de la represa ·El Granero” está regida bajo los acuerdos llegados en el Tratado de Límites y Aguas de 1994 por parte de Estados Unidos y México. Es así como Conagua, regida bajo el tratado entre los países, entregará agua de Chihuahua a Estados Unidos.
Tratados entre Estados Unidos y México
A pesar de los reclamos surgidos en Chihuahua, es un deber cumplir con lo acordado en el Tratado de Límites y Agua; de esta manera, Conagua, Comisión Nacional del Agua, aclaró que la acción promovida por el gobierno, de aumentar la cantidad de agua extraída en la represa Luis L León, mejor conocida como “El Granero”; está promovida como una de las condiciones del Gobierno Federal en favor al cumplimiento de los compromisos existentes en el Tratado.
Las condiciones del tratado deben ser respetadas, mientras exista el tratado. La medida se ejecuta con la consideración que seguirá al 100% la cantidad del vital líquido para los trabajadores del campo de ese sector, durante este año en curso; así es como se cumplirán y se permitirán las actividades que comúnmente se desarrollan a raíz de este tratado, por ejemplo; la pesca.
Asegura el uso continua del recurso
Así es como el agua que se encuentra en la cuenca y el vaso de dicho embalse, continuará surtiéndose con el agua que se encuentra almacenada, permitiendo las actividades de pesca del sector. Nunca se desmejorarán las condiciones actuales de ambas partes del tratado.
Las autoridades, de igual forma, señalaron que todo lo concerniente con las acciones a tomar, estará en manos de los productores de la región y de las autoridades correspondientes. De igual modo, al aumentar el envío de agua al país vecino, el líquido no disminuirá para el sector, el cuerpo de agua contenía con 117 millones de metros cúbicos de líquido contenido.
Cumplimiento eficaz de las líneas del Tratado
Conagua aclara que la línea que se quiere seguir con el Tratado es cumplir con el Tratado de Límites y Aguas de 1994. De esta manera, los gobiernos de México y Estados Unidos convinieron que toda la corriente de agua que se descargue a través del río Conchos, servirán para cumplir con los compromisos adquiridos con el país y dentro del país. Por lo tanto, no existen dudas ni temores y mucho menos riesgos de no poder surtir de agua a las zonas agrícolas del sector.
Además, el Gobierno Federal, asegura que los que se sirven del agua de la zona están amparados jurídica y técnicamente, y pueden contar que el gobierno cumplirá con sus obligaciones y tratados internacionales.